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Enseñar música en inglés puede ser una excelente oportunidad para los profesores de ambas materias. La enseñanza de la música en inglés está dentro del enfoque metodológico integrado CLIL - Content and Language Integrated Learning. Esto quiere decir que las lecciones de una disciplina no lingüística se abordan mediante el uso de una lengua extranjera.
El ejemplo de la música y el idioma inglés es muy apropiado ya que las dos materias son particularmente compatibles, lo que facilita el aprendizaje de ambas.
Este método ayuda a aumentar la confianza de los estudiantes en sus propias habilidades lingüísticas y así mejorar, en la práctica, sus habilidades para hablar y escuchar en inglés, incluso cuando se trata de una asignatura técnica como la música.
Enseñar música en inglés, sin embargo, puede parecer complicado, pero estructurando un camino ad hoc y colaborando de forma eficaz es posible combinar con éxito las dos materias, con resultados que no dejarán de sorprender. A continuación, presentamos cinco consejos útiles para los profesores.
1. COLABORACIÓN ENTRE PROFESORES
Aplicar el enfoque CLIL a la música ha de ser un camino de colaboración. La preparación de las lecciones y el itinerario didáctico integrado debe provenir de un trabajo conjunto del profesor de música con el profesor de inglés, con el fin de coordinar las actividades para lograr los objetivos de aprendizaje tanto comunes como específicos para las dos materias específicas.
2. NO A LAS CLASES TEÓRICAS
Enseñar música en inglés es una oportunidad para obtener lo mejor de ambos mundos y esto no se puede traducir simplemente en una lección de música, pero impartida en inglés. La práctica es el aspecto central de ambos materiales y por eso su integración funciona tan bien.
El aprendizaje será, tanto para el inglés como para la música, más fluido y natural.
3. PREPARA EL VOCABULARIO PREVIAMENTE
Es fundamental que el profesor de música hable con anterioridad con el profesor de inglés sobre el tema de la próxima lección para que pueda prepararse en el vocabulario específico del tema a tratar.
El aprendizaje de vocabulario específico de una asignatura es una de las grandes riquezas de la experiencia CLIL tanto para los alumnos como para los profesores (que siempre aprenden mucho preparando lecciones CLIL).
El uso de imágenes / ejemplos / videos, etc. y la repetición continua del léxico durante la lección ayudará mucho a los estudiantes a comprenderlo y adquirirlo.
4. ALTERNA TEORÍA CON ACTIVIDADES PRÁCTICAS
La mejor manera de integrar la nueva terminología técnica es alternar, durante la lección, momentos de explicación con otros espacios para la práctica en los que se puedan aplicar los conocimientos adquiridos. Esto puede llevarse a cabo de varias formas: mediante juegos, herramientas visuales, simulaciones que van a ser muy útiles para comprender plenamente el uso de terminología específica y para facilitar su memoria.
5. ORGANIZA EL TRABAJO EN 3 PASOS
Un método eficaz para organizar mejor las lecciones de música en inglés es el de los 3 pasos:
1.- Organiza y prepara el material de referencia musical y lingüístico.
2.- Haz la tarea: donde tiene lugar la actividad real.
3.- Deberes y revisión de deberes: Es importante encomendar un trabajo para hacer en casa para consolidar los contenidos aprendidos y luego verificarlos durante la próxima clase.
Esta organización permite estructurar las lecciones de una manera sencilla y funcional, en beneficio del aprendizaje.
Trinity College London cree firmemente en el enfoque CLIL para el aprendizaje del inglés y la música.
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